En cuanto a lo del Profesor de Saxofón, esto sí que ha sido una sorpresa, ni me lo hubiera imaginado. Porque desde hace mucho tiempo se estaba pidiendo que yo dejara de ser el Director de la Escuela y que no continuara como Profesor de Clarinete, pero ni una palabra (ni siquiera un rumor) en cuanto a que dejara de ser Profesor de Saxofón. A finales de Agosto un profesor me preguntó qué es lo que estaba dispuesto a renunciar si me lo pidiesen: La Dirección de la Escuela o el tener que dejar las clases de Clarinete. Y yo, no comprendiendo exactamente el por qué de esa pregunta, le dije que yo no tenía por qué renunciar a nada, mientras no se me explicaran los motivos que pudiera haber para tener que hacer yo cualquier renuncia. Esa pregunta, que me parecía que no venía a cuento en aquel momento, está cobrando sentido quizá estos últimos días. No será que ahora lleguen diciendo, porque después de la última reunión todavía ni siquiera se han puesto en contacto conmigo: “Hemos reconsiderado la cuestión y hemos decidido que continúes como Profesor de Saxofón”. Y así parecería como que han quedado maravillosamente bien, después de todo. Pero al final se hubieran salido con la suya porque lo que se pretendía era que yo renunciara a esos dos cargos, como he manifestado al principio de este bloque.