Desde el Viernes 19 ya me había hecho a la idea de que me iba a ocupar de las clases de Saxofón pero con todo lo que ha ocurrido después ya no lo tengo tan claro porque me siento engañado, por parte de unos y por parte de otros. Ya dije en su momento las razones por las que renunciaba al cargo de Profesor de Contrabajo y de otras actividades relacionadas con una futura orquesta. Pero además, ¿quién va a saber mejor que nadie si yo estoy preparado, no ya profesionalmente, sino anímicamente, para afrontar otros retos distintos a los que me he propuesto durante los últimos años? En cuanto a formar parte del Equipo Directivo, quizá algún día y con otras personas. Es verdad que aquí se necesita un cambio. Pero no solo por lo que había antes, sino también por lo que hay ahora. De eso podría encargase en buena medida, si por fin se constituyera, la Asociación de Padres de Alumnos de la Escuela de Música. Creo que ya tiene bastante trabajo por delante. Lo que yo pueda aportar, espero que pueda merecer la pena. Pero no voy a ser yo quien deba decir qué personas tendrían que dimitir por todo esto. En su momento ya lo hice (en 1999) y la verdad es que salió bastante bien. Ahora sería muy interesante saber quiénes van a ser los primeros en hacerlo.